El Superior Tribunal de Justicia (STJ) reconoció a aquellos magistrados y funcionarios judiciales que se jubilaron este año, como así también a aquellos que llevan 25, 30 y hasta 40 años desarrollando su función.
El acto se realizó el último lunes, en el marco de un nuevo Día del Magistrado y la Función Judicial, que celebra cada 15 de septiembre con motivo de la creación en 1966 de la Federación Argentina de la Magistratura y la Función Judicial, donde se conformó la primera convención constituyente que nucleó a magistrados de toda la Argentina.
En la ocasión, los jubilados recibieron un diploma de reconocimiento, mientras los funcionarios que aún se encuentran en actividad fueron distinguidos con una medalla en honor a sus trayectorias.
La celebración fue encabezada por la presidenta del STJ, la ministra Rossana Venchiarutti Sartori, quien estuvo acompañada por sus pares Cristian Marcelo Benítez, Froilán Zarza, Juan Manuel Díaz, Ramona Beatriz Velázquez, Jorge Antonio Rojas y Cristina Irene Leiva.
“Gracias a quienes están en actividad y van a recibir la distinción. Muchísimas gracias a los ya jubilados que reciben esta reconocimiento el día de hoy y a los familiares que acompañan. Creemos que, de todos los actos protocolares que tenemos, esta es una fiesta, la fiesta del magistrado y del funcionario judicial, la fiesta del Poder Judicial que es tan preciado para nosotros como el día del empleado judicial que recordamos en noviembre, son nuestras fechas, son las fechas que nos identifican como institución son las fiestas judiciales”, agradeció Venchiarutti Sartori.
También hubo un minuto dedicado al recuerdo de aquellos funcionarios judiciales que ya no están y en ese punto la presidenta del STJ expresó: “Quería en este acto recordar, aparte de los que se han jubilado, a aquellos que hemos perdido en el Superior Tribunal de Justicia en los últimos tiempos”.
Allí mencionó: “Valga como un homenaje a nuestra querida Liliana Mabel Picazo que la venimos recordando mucho. Al doctor Manuel Augusto Márquez Palacios a quien tuve muy de cerca y de quien aprendí mucho. Por último a Humberto Schiavoni, a quien conocí, y a Humberto Primo Bertolinni quien también fue parte este Superior Tribunal”.
Los reconocimientos:
