El lunes, a partir de las 8.30, en la sala de audiencias del Tribunal Penal Dos de Posadas, comenzará el juicio oral y público contra Rita Marianela Cervantes Martínez, la mujer de 31 años que el 7 de septiembre de 2020 fue detenida y acusada de intentar matar a su beba recién nacida, aunque la defensa sostiene que todo ocurrió en un contexto de psicosis puerperal, por lo cual la cuestión de la salud mental será uno de los tópicos de discusión.
El tribunal encargado de llevar adelante el debate estará integrado por los magistrados Carlos Giménez, Gregorio Busse y César Yaya, mientras que la fiscalía estará representada por Vladimir Glinka y la imputada contará con la defensa de las letradas Luciana Sommer Aromí y Karen Rodríguez De Olivera.
Rita llega a esta instancia detenida y procesada por los delitos de “homicidio calificado por el vínculo, en grado de tentativa, hurto y alteración de la identidad de un menor de 10 años, todos en concurso real”, lo cual equivale a una expectativa de pena alta en caso de ser considerada penalmente responsable al final del proceso.
La causa que se ventilará en debate tuvo su inicio el 7 de septiembre de 2020, cuando un atleta corría por la Costanera Oeste de Posadas y se topó con una bolsa plástica con una beba recién nacida malherida en su interior.
La investigación posterior determinó que la niña era hija de Rita Cervantes Martínez, que esa misma noche fue detenida en estado shock.
La reconstrucción trazada indica que dos días antes salió de su casa para atenderse en el hospital por una fibrosis, pero al someterse a estudios constató que cursaba un embarazo de 36 semanas.
Ya desde el comienzo del caso, la defensa de Rita sostiene que la imputada en ningún momento supo de su estado, que experimentó un embarazo sin síntomas y que el parto se dio en el contexto de una “psicosis puerperal”.
Las defensoras Sommer Aramí y Rodríguez De Olivera confían en demostrar toda esta cuestión con pruebas científicas y celebran el desarrollo del juicio como una oportunidad para que Rita “se escuchada por primera vez y pueda contar qué sucedió para que tanto el tribunal como la sociedad sepa su historia de primera mano”.
“Sin dudas es un caso que plantea muchísimos desafíos probatorios, en el sentido de que no son situaciones habituales. Ella tuvo un embarazo sin síntomas, no tuvo panza y menstruó durante todo ese tiempo. Todas estas circunstancias ya de por sí son particulares y a ello se suma la cuestión de la salud mental, que no están trabajadas a nivel social pero sí a nivel científico y eso es lo que vamos a probar en este juicio”, sostuvo Sommer Aromí en diálogo con Será Justicia.
En esa línea, la letrada descartó de plano la hipótesis acusatoria plasmada en la elevación a juicio del expediente tramitado por la Fiscalía y el Juzgado de Instrucción Siete de Posadas.
“La hipótesis acusatoria plantea un 100% del uso de las capacidades físicas y mentales de Rita. Es decir, contempla el accionar como un accionar doloso, lo que significa que la fiscalía tiene el difícil trabajo de probar que ella al momento del hecho sabía lo que estaba haciendo, que quería actuar en consecuencia, motivándose con la idea de quitarle la vida a su hija”, agregó Sommer Aromí.
En contraposición a ello, la abogada defensora postuló que “Rita tuvo un episodio de psicosis puerperal. Ella ni siquiera se acuerda qué fue lo que pasó. Incluso para la defensa lo ideal sería que ella pudiera explicar qué fue lo que sucedió, pero están los profesionales médicos psiquiatras, psicólogos y obstetras que van a explicar en el juicio cómo este fenómeno hace que la persona disocie, anule, olvide o no tenga la capacidad de materializar qué fue lo que sucedió en el lapso de tiempo que la psicosis duró”.
La letrada contó que a pesar de su detención, Rita mantiene el vínculo con su pareja y sus dos hijos, uno que ya tenía 3 años al momento del hecho y la recién nacida en aquel entonces.
“Rita es una madraza, hasta el día de hoy es una mamá presente, que todos los días está pendiente de sus dos hijos. Los dos la reconocen como mamá. Tienen un vínculo hermoso que lastimosamente ahora es mayormente por videollamada. Ella lo que más quiere es tener ese contacto verdadero con sus hijos. El papá de los chicos pide que ella tenga vinculo, él sabe que ella es una excelente madre”, destacó por último la abogada penalista.
Antecedente reciente
Sommer Aromí mencionó como antecedente un caso registrado en 2016 en La Plata, donde una nutricionista de 36 años ahogó a su beba de dos meses en una bañera.
“Presenta signos y síntomas compatibles con un episodio psicótico agudo de inicio en el puerperio inmediato con riesgo cierto e inminente en función de sus ideas suicidas”, consignaron los peritos intervinientes.
Un año después, la jueza de Garantías Marcela Garmendia la declaró inimputable y dictó su sobreseimiento definitivo, aunque dispuso que la mujer quede internada en un instituto neuropsiquiátrico.