Ante el aumento de delitos informáticos y la adaptación de nuevas técnicas y modalidades, el diputado renovador José Luis Pastori anunció un proyecto de ley que permitiría, a un agente de las fuerzas de seguridad, ocultar su identidad (como espías) a fin de obtener información útil para el avance de investigaciones a través de medios electrónicos, especialmente en casos donde se vea afectada la integridad de un menor.
El proyecto impulsado por el bloque del Frente Renovador de la Concordia se denomina “Investigación encubierta en entornos digitales”, bajo la premisa de que: “El Estado debe adaptarse y actualizarse para así abordar los delitos cada vez más complejos, especialmente aquellos que involucran nuevas tecnologías”.
En un video que compartió a través de su cuenta personal de “X”, el legislador misionero reconoció que: “El crecimiento de internet ha ampliado las oportunidades de cometer delitos, aprovechándose de la gran cantidad de usuarios que acceden a la red desde una variedad de dispositivos”.
🙌PROYECTO DE LEY: Investigación Encubierta en Entornos Digitales.
El Estado debe adaptarse y actualizarse para así abordar los delitos cada vez más complejos, especialmente aquellos que involucran nuevas tecnologías.
En esta oportunidad hemos presentado un *Proyecto de Ley*… pic.twitter.com/FOLAG2IDqB— Jose Pastori (@PastoriJoseLuis) August 13, 2024
En ese sentido, reconoció: “Este panorama ha generado un aumento en la población potencialmente vulnerable a distintos tipos de ataques y delitos, lo que incrementa las oportunidades para que los delincuentes utilicen la tecnología para estas acciones. Por lo tanto, es fundamental que las fuerzas de seguridad comprendan los desafíos actuales al investigar delitos cometidos a través de redes informáticas”.
Según indicó Pastori, el proyecto de ley en cuestión fue trabajado en conjunto con el Superior Tribunal de Justicia (STJ) de la provincia en virtud de “la necesidad de considerar la figura del agente encubierto digital como una herramienta de investigación”.
Por último, consideró que: “La implementación de agentes encubiertos digitales debe realizarse con cautela y dentro de un marco legal estricto que garantice el respeto a los derechos individuales y la privacidad. Además, es crucial proporcionar la capacitación adecuada a estos agentes para garantizar un uso ético y efectivo de esta herramienta en la lucha contra la delincuencia en el entorno digital”.